viernes, 28 de diciembre de 2012

El 'Top 5' del fraude por Internet




Los agentes de la Policía Nacional encargados de la seguridad tecnológica conocidos como la Briga de Investigación Tecnológica (BIT) han elaborado un pequeño ranking sobre los engaños más comunes y más repetidos que se han producido en la red a lo largo de este año.

Este 'Top 5' denominado por la propia Polícia se ha realizado en base a las denuncias, consultas y peticiones de ayuda realizadas por los internautas a través de diferentes medios como por ejemplo el correo electrónico, el teléfono y las redes sociales.

1. Fraudes en la compraventa o alquiler. En los últimos años, el fraude se ha incrementado debido a los anuncios en las diferentes páginas de compraventa o alquiler entre particulares y los intentos de fraude en supuestos chollos en los productos más demandados: productos tecnológicos y smartphone, coches de segundamano. También el sector inmobiliario ha sufrido de estos fraudes, alquileres en viviendas  ideales céntricas o apartamentos de vacaciones muy atractivos.

2. Ofertas de trabajo falsas. Algunas de ellas consistían en pedir una pequeña cantidad de dinero por adelantado en concepto de temario o material, cursos previos del puesto a realizar, gastos de tramitación   por la contratación, pedir que se llamen a un teléfono de alto coste o bien redireccionarle hacia ese tipo de números y alargar la llamada telefónica supuestamente de recopilación de datos o sobre una entrevista de trabajo el mayor tiempo posible.

3. Virus haciéndose pasar por instituciones como la Policía, la SGAE o la AEPD. Se han alertado de este tipo de fraudes por parte de la policía, aún así, ha habido casos de contagio. Estos virus son muy peligrosos y lo que hacen es bloquear el ordenador, inventándose una multa de 100 euros por haber detectado en el ordenador pornografía infantil en el disco duro o archivos que violan la propiedad intelectual o la Ley Orgánica de Protección de Datos. Se pide que el pago se realice mediante medios que no se pueden rastrear, no son detectables y una vez que el usuario ha realizado el pago, ve que el ordenador no recupera su funcionamiento habitual.

4. 'Phising' bancario. El phisising es un método por el que se obtienen las claves de usuario de un internauta mientras que navega por Internet para después utilizarlos y conseguir beneficios fraudulentos. El engaño más novedoso este año es el envío de SMS para solicitar los datos de la tarjeta de crédito para desbloquearla por motivos de seguridad. También ha habido intentos de robo de las cuentas de redes sociales y correos para después utilizarlas.

5. Fraude sobre SMS y llamadas de alta tarificación. Los ganchos utilizados son varios: desde supuestos paquetes que no se han recogido, a supuestas llamadas de personas que no tienen saldo y requieren contactar con ellos a través de esos medios, falsos premios en concursos en los que no se ha participado o mensajes ambiguos de supuestas personas recién separadas y que quieren tomar un café.

Los agentes de Polícia recomiendan a los internautas que durante su navegación siempre usen medidas de seguridad básicas.

- Actúa con 'desconfianza racional' ante ofertas de fuente desconocida, a un precio excesivamente barato o demasiado ventajoso respecto a la media del mercado.

- No des siempre por supuesto que tu interlocutor vía web, correo electrónico o red social es quien dice ser. Ni aunque sea a través de la cuenta reconocida de un amigo tuyo. Puede haber sido 'secuestrada'.

- Desconfía de frases breves en perfiles de redes sociales o cuentas de correos y links acortados.

- Si te hacen llamadas perdidas desde un teléfono de alta tarificación (905... o 80...) no la devuelvas, jamás. Y desconfía absolutamente de los mensajes que te llegan desde un teléfono móvil corto que intenta que interactúes de alguna forma.

- Aquellas supuestas ofertas de trabajo que requieren un desembolso económico previo no son casi nunca reales y encierran un engaño o afán de recaudar a costa de los que buscan empleo.

- No compres en webs desconocidas que te lleguen a través de links acortados o fuentes no fiables.

- Verifica que la dirección de la web con la que interactúa en la barra de su navegador es absolutamente igual que el nombre de la empresa.

- Si recibes un SMS o un correo pidiendo que actualices tus datos bancarios, de tarjeta o cuenta, no contestes ni rellenes formularios de ningún tipo.

- Si ves en Internet algún chollo, indaga sobre él. Tanto por la opinión de otros compradores (votos, confianza, trayectoria, etc.) como en cualquier buscador, introduciendo datos por si otros usuarios alertaran de algo raro en dicha oferta.

- Si lo comprado a otro particular es de gran valor económico, exige que el envío sea certificado y asegurado y que se declare el valor real del paquete.

Además de estas medidas, se recomienda algunas otras concernientes a la seguridad básica en el ordenador como tener un antivirus actualizado, utilizar programas originales, actualizar el sistema operativo. A éstas se pueden añadir algunas como las mencionadas en nuestra entrada anterior. 

También recomienda utilizar medios de pago rastreables y consultar con periodicidad los movimientos de la tarjeta y cuenta bancarias.

Fuente:
El Mundo

viernes, 21 de diciembre de 2012

Consejos para evitar el fraude de tu tarjeta de crédito


Las Navidades están a la vuelta de la esquina, muchos ya se han apresurado a hacer sus compras navideñas, otros en cambio, esperarán al último momento para hacerlas. Sin embargo, la mayoría de los compradores suelen realizarlas en tienda física, pero los más tecnológicos prefieren hacerlo a través de la red. Este hecho supone que se tengan que extremar las precauciones a la hora de adquirir un producto de forma online. Por ello, queremos daros algunos consejos a la hora de comprar por Internet y evitar un posible fraude con tarjetas de crédito. 

1. Las compras online siempre deben hacerse a través de páginas seguras. Esto podemos verlo en la barra de direcciones de nuestro explorador, sabremos si son seguras cuando aparezca 'https://' en vez de 'http://'. Es posible que también aparezca un candado eso nos indica que la página es segura para realizar compras con tarjetas de crédito. 

2. No fiarnos de las páginas que nos parezca sospechosas o poco seguras. Si cuando visitas una página tienes la sensación de que el sitio no es de confianza por su mal diseño o falta de información o por direcciones de la empresa algo extrañas, es mejor no hacer la compra, puede que sea una tienda online falsa. 

3. Antivirus. Es importante si navegas ya sea con el ordenador o con un smartphone utilizar un buen antivirus para evitar el fraude en Internet. Existen algunos gratuitos como Avast o Avira para protegerte contra las amenazas.

4. Información en la red. Hay que tener precaución con los datos que proporcionamos en la red como la dirección o el DNI. Pueden utilizarse este tipo de información para un uso inapropiado como para pedir préstamos rápidos, tarjetas de crédito o registrarnos en páginas en Internet. 

5. Desconfiar de aquellos correos del banco que nos lleguen donde se nos pida nuestro número de tarjeta y los números secretos. El pin de nuestra tarjeta es personal e intransferible, no debemos proporcionar nunca este número. 

6. Guardar los comprobantes de pago, así como las facturas realizadas online. Será de gran utilidad para comprobar que los cargos recibidos se corresponden con las compras hechas. 

7. Pagar con una tarjeta secundaria. Un buen truco para no poner en peligro nuestra economía es tener una tarjeta con poco dinero para realizar las compras a través de Internet. Algunos bancos ofrecen la posibilidad de un tipo de tarjetas denominadas tarjetas virtuales recargables para realizar compras online donde puedes añadir una cantidad determinada de dinero a cambio de una pequeña comisión. De esta forma el resto del dinero estará seguro. 

8. Avisar a tu banco y cancelar la tarjeta ante cargos fraudulentos. Es importante tener el teléfono para poder avisar para la cancelación de la tarjeta de débito lo más pronto posible. Lo recomendable es que sea antes de 72 horas. 

Fuente:

Club tarjetas

jueves, 13 de diciembre de 2012

20 reglas para escribir Historias de Detectives (II)

Como comentábamos la semana pasada, hay cientos de formas de escribir una historia de detectives, pero pocas formas de hacerlo bien. Os damos 10 normas para que vuestra historia de detectives sea perfecta.


1. Los empleados domésticos deben ser la última opción por el autor para ser los culpables de la historia. Es demasiado fácil y el autor se merece una buena recompensa por su tiempo y dedicación a la obra porque sino sentirá que perdió el tiempo. El culpable del crimen debe ser alguien merecedor del puesto, alguien que no parezca sospechoso.

2. Sólo necesitamos un culpable, aunque puede haber un colaborador, un cómplice, un compinche que ayude a la hora del crimen, pero la culpabilidad del crimen debe recaer sobre una sola persona.

3. Aspectos y organizaciones tales como la mafia, sociedades secretas, etc no tendrán cabida en este tipo de relatos. Este tipo de organizaciones están muy bien en relatos de espías o de aventuras. Además, supone que la culpabilidad del delito sea compartida. No se le puede proporcionar una sociedad secreta en la que se pueda refugiar, no se puede permitir que obtenga ese tipo de ventajas.

4. La verdad tiene que ser un elemento que esté a la vista para que el lector con su astucia pueda llegar a detectarla. Si el lector en algún momento, decide releer el libro, verá que la solución estaba en cierto sentido, ante sus ojos, que todas las pistas señalaban al culpable y que si hubiera sabido encajar todas las piezas tan bien como lo hizo el detective, podría haber resuelto el misterio por sí solo sin tener que llegar al último capítulo.

5. La forma en la que se lleva a cabo el asesinato y los medios para resolver el crimen deben hacerse a través de métodos racionales y científicos. Es decir, la ciencia ficción y los métodos imaginativos deben dejarse a un lado en este tipo de relatos. Sólo se puede recurrir a elementos reales, si el autor traspasa la realidad y se adentra en el mundo de la imaginación se sitúa fuera de los límites de la ficción detectivesca.

6. Los extensos y abundantes pasajes de descripciones tienen que evitarse, hay que evitar también adornar los problemas con exhibiciones literarias, crear atmósfera o bien hacer análisis de personajes. Lo que provocan es retrasar la acción y la fluidez del relato. Son temas irrelevantes para el objetivo principal de la narración que es plantear un enigma, un punto de partida, analizarlo y solucionarlo. El lector lo que busca es una estimulación mental y que suponga una actividad intelectual. Por este motivo, sólo debe haber descripciones y un dibujo de los personajes para darle a la novela una verosimilitud.

7. Un delincuente profesional nunca debe cargar con la culpa en una novela policíaca. Los delitos realizados por ladrones de pisos o gángsteres pertenecen al departamento de policía y a no los grandes detectives. Esta clase de delitos pertenece a la rutina de trabajo de las Oficinas de Homicidios de la policía. Un interesante crimen es aquel donde se sitúa por ejemplo en los pilares de una iglesia.

8. Nunca debes acabar la historia con un accidente o un suicidio. Puede llegar a defraudar al lector, llegando a sentir que se han se han burlado de él.

9. Los motivos de los delitos en las historias de detectives tienen que ser personales. Los complots, las conspiraciones y la política de guerra pertenencen a una categoría diferente de la ficción. Una historia criminal debe ubicarse en el ámbito de lo cotidiano y de lo corriente, y darle una cierta salida a sus propios deseos y emociones reprimidos.

10. Los siguientes puntos han sido empleados y resultan familiares a todos los verdaderos amantes de la literatura criminal. Usarlos es una confesión de ineptitud y falta de originalidad por parte del autor:
a) Determinar la identidad del culpable comparando la colilla dejada en el lugar del crimen con la marca fumada por un sospechoso.
b) El ritual espiritista para asustar al culpable y forzar su confesión
c) Falsas huellas.
d) La coartada de la figura simulada
e) El perro que no ladra y con demuestra que el asesino es conocido.
f) La acusación final contra un gemelo o un pariente que se parece exactamente a la persona sospechosa, pero que es inocente.
g) El crimen en una habitación cerrada por dentro,
i) El test de asociación de palabras para descubrir al culpable,

j) La carta en clave que es desentrañada por el detective.

Fuente:

Andreumartin blog

viernes, 7 de diciembre de 2012

20 reglas para escribir Historias de Detectives (I)


S. S. Van Dine fue el pseudónimo utilizado por Willard Huntington Wright, un crítico de arte y autor norteamericano. Creó el personaje del detective Phile Vance que apareció en varias obras escritas a partir de 1920 y posteriormente en películas y radio. 

Este autor publicó en la revista ‘American Magazine’ en septiembre de 1928 lo que a su juicio eran las 20 reglas que creía imprescindibles y estimulantes a la hora de escribir un relato policial. 

El famoso artículo relataba lo siguiente: 

“El relato policíaco es una especie de juego intelectual. Es más, llega a ser un acontecimiento deportivo. Y para escribir historias policíacas hay unas leyes muy definidas, quizá no escritas, pero obligatorias; y cualquier maquinador de misterios literarios que se precie trabaja sobre esta base. 

Lo que aquí sigue es una especie de credo, basado en parte en la práctica de todos los grandes escritores de historias policíacas, y en parte en los impulsos de la honrada conciencia del autor”. 

A continuación las ponemos de relieve. 

1. El lector debe tener las mismas oportunidades que el detective literario para resolver el misterio. Todas las pistas deben ser mostradas y descritas. 

2. El lector no debe caer en ninguna trampa o despiste que no sean las legítimamente puestas por el criminal al propio detective. 

3. No debe haber intriga amorosa. El objetivo es llevar al culpable ante la justicia para que rinda cuentas de sus actos. No se trata de relatar líos amorosos, se trata de evitar cualquier tinte romántico en la historia. 

4. El detective, así como sus colaboradores, no serán nunca los culpables del relato. Es algo de mal gusto que no debe hacerse nunca. 

5. El culpable será descubierto por el lector por deducción lógica, no por accidente, coincidencia o confesión sin motivos. Resolver un enigma criminal de esta forma es como decirle al lector que investigue de modo que cuando no encuentre lo que buscaba, decirle que todo se basaba en un as que traíamos escondido en la manga. 

6. Un detective lo es en la medida en que sabe detectar algo. Su función es recopilar pistas que le ayuden a trazar el camino que debe seguir hasta encontrar al criminal. Si el detective no es capaz de sacar conclusiones a través de las pistas que se le presentan es como el alumno que conoce el resultado final de un problema de aritmética, pero no conoce el proceso para llegar hasta él. 


7. En una novel a policíaca tiene que haber un cadáver y cuanto más muerto esté el mismo, mejor para la trama. No es suficiente con un delito menor que el asesinato. Un libro de unas trescientas paginas es demasiado para cualquier delito que no contenga en sus páginas un asesinato. El tiempo de los lectores dedicado a la obra se merece una recompensa. 

8. La resolución del crimen debe hacer a través de medios estrictamente lógicos. Los métodos menos ortodóxos como la cábala, la ouija, lectura del pensamiento, tarot o cuestiones similares, no son aptos en este tipo de novelas. El lector no puede competir con los recursos utilizados en la otra dimensión. 

9. No puede haber más de un detective en la trama. Combinar la mente de tres o cuatro, teniendo en cuenta las diferentes formas de pensar de cada individuo conlleva a que el lector se disperse, pierde el interés y rompa el hilo de la historia. Con la aparición de varios detectives, supone que el lector tengan que averiguar a cuál de todos ellos debe seguir. 

10. El culpable tiene que ser una persona que haya sido más o menos importante durante el desarrollo de la trama, es decir, que sea alguien conocido y familiar para el lector. Un escritor que elija a un personaje extraño o irrevelante en la trama, está confesando su incapacidad para enfrentarse con el lector. 

En el próximo post os costaremos el resto de claves para escribir una historia de detectives. ¿Te gustaría añadir alguna más? Déjanos un comentario en nuestro blog.

Fuente:
andreumartinblog